Nueva esperanza

Por Pilar Medina

Nueva esperanza

Aquí estoy parada frente a la vida
Tras de mí tantas huellas
En tantos caminos andados
Unos ciertos y otros errados
Todos caminos en penumbras
Un tiempo creí que acompañada iba
Pensé que una mano me sostenía
Y a ella me aferraba hasta el dolor
Cerraba los ojos y andaba
Creí que su amor me protegía
Creí que la mano me guiaba
Y a donde esa mano me llevaba
Ciegamente yo iba
Pero un día esa mano paró y me soltó
Desconcertada me aterré…
Yo… yo no viviría pensé
Abrí los ojos lo más que pude y lo que vi me espantó
La misma mano se unió a otras
Vinieron hacia mí ,me arrancaron el corazón a golpes
bebieron mi sangre gota a gota
Me dejaron desnuda se llevaron todo de mí…
Pero ¡oh, milagro!… todo en mí se regenera
Mi cuerpo se yergue
Y aquí estoy parada frente a la vida
Ahora no hay mano pero aun hay camino
pero esta vez es un camino
Lleno de luz de amor de esperanza.

Pilar Medina

Autor: Kantō - Redacción

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2 Comentarios

  1. CANTO DE VIDA Y ESPERANZA

    Pino amigo,
    Pino de RIKUZENTAKATA
    Símbolo de vida agigantada
    Pino del bien común, de la noche no grata,
    Pino que luchas por la vida y para la vida

    Pino que aguardas en tus entrañas
    Los días amargos del tsunami cruel,
    Recuerdos, perecederos, imborrables y tristes
    Del hombre contra la naturaleza de tu seres
    Embestidas despiadadas de tu entorno hermoso;
    Naturaleza que aguarda, pero no aguanta
    Hoy te pido Pino amigo: Aguanta, aguanta
    Pino fiel
    Pino amigo de RIKUZENTAKATA.

    Pino del entorno aquel
    A ti te dedico este humilde homenaje.
    De vida sublime y sensitiva
    A cómo te consagro, nuestro insigne poeta “Rubén Darío”
    “Dichoso el árbol que es apenas sensitivo…” y yo sensato
    y sensitivo ante ti.

    Hoy te digo; Pino amigo
    Pino fiel de “RIKUZENTAKATA”
    Árbol sensitivo de la vida
    Y por la vida
    Aguanta,
    Aguanta, aguanta
    Que la vida es corta, a veces apacible e intolerable
    Y a veces larga
    Larga, larga…pero cruel
    y tu Ejemplo vivo de inmortalidad fecunda,

    ¡Oh!, naturaleza sensata y sensitiva
    Estandarte de la vida larga y duradera
    Hoy vengo a honrar tu don natural
    tu privilegio
    Pino digno
    verdadero pino de pinares.
    Pino mío,
    ¡Mí héroe natural!

    Desde lo alto de mi corazón,
    Te veo grande, hermoso y frondoso
    imperativo;
    De mirada altiva y serena
    Pino que auguras el futuro incierto
    Pero cierto, hasta estos hechos
    Con esperanzas de vida clara
    de vida y para la vida
    Con horizonte de una mañana despejada,
    Con estrellas y de noches fulgurantes
    Como plegaria del niño, de la niña, del hombre aquel, de aquella mujer
    y de toda especie viva que se movía por ahí.
    y que guardan en su corazón notas de amor,
    Notas de la esperanza de un mañana mejor.

    Pino santo,
    Pino sagrado,
    Pino que a aun vives el corazón de la tierra;
    Que vives en esas miradas tristes de tus hijos;
    En el corazón de tu pueblo,
    en el corazón de la humanidad

    Pino testigo,
    Pino visible ante los ojos de Dios,
    Como decirte que te admiro,
    Que eres sincero, que allí estas,
    Hoy te respeto y te venero más que ayer
    Fuerza viva del mañana
    Fuente de vida y esperanza que no se pierde,
    Que está aquí, que estará allí…

    Pino sensitivo
    Pino eterno
    Eslabón de eslabones
    Mantén tu mirada firme en ese alto
    Por las esperanzas que te tuve, que hoy te tengo
    Por lo que quisiéramos ser
    Por lo que no conocemos
    Y por lo que apenas sospechamos…
    (José Luis Artola Pérez-01 de Abril de 2011)

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  2. Gracias José por compartir tu poema.

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