Los peruanos en Japón
Por Álvaro Del Castillo
“Sobre la vida y el trabajo de los peruanos en Japón” (Parte I)
I Recuento Histórico
1.- El Boom de la Burbuja Económica.-
En el año de 1985, se gesta el fenómeno económico conocido como la “Burbuja Económica” que posibilitó la venida de los migrantes económicos peruanos al Japón. “Burbuja Económica”, es un concepto de las ciencias económicas y se refiere al aumento desmesurado e ilógico de los precios de los bienes, en el caso japonés de los bienes inmuebles debido al crédito barato, la economía crece como una “burbuja” sin bases sólidas. Pero 1985 no es el inicio real del fenómeno migratorio peruano al Japón. Los primeros migrantes salen desde 1986.
Las empresas japonesas de colocación de mano de obra en primer lugar dirigen su atención al Brasil. Los motivos son porque Brasil es el país que cuenta con un gran número de descendientes japoneses en Latinoamérica, el segundo es el Perú.
a.- Agentes que posibilitaron la migración.-
Son varios los medios de que se valen los empresarios japoneses para acercarse al mercado laboral peruano. Por el año de 1986, en pequeños grupos de dos a cuatro personas, empiezan a migrar los primeros peruanos atraídos por el dorado japonés.
Agentes que intervienen en la migración de mano de obra:
1- Agencias de Viajes.- Estas fueron las instituciones “naturales” de contacto entre ambos mercados, se destacaron por incursionar en el “negocio de la oferta de trabajo en el Japón”, representando directamente a empresas japonesas como intermediarios de “agencias contratistas de trabajo”, u ofreciendo solamente el pasaje de avión.
2.- Agencia Contratista de Trabajo.- Llegan al Perú a ofertar sus servicios vía una Agencia de Viajes, de personas particulares y directamente. Las principales “agencias contratistas de trabajo” japonesas estuvieron presentes en el Perú.
3.- Tramitadores Informales.- Personas individuales que ingresan informalmente al negocio, de “Oferta de Trabajo en el Japón”, lo llevan a cabo conectándose con una Agencia de Viajes vía los contactos con familiares que trabajan en Japón. Trabajadores migrantes que conocen el funcionamiento del mercado y se ofrecen de intermediarios. En otros casos son japoneses residentes en Perú que tenían contactos con empresas japonesas.
4.- Relaciones Interpersonales.- Los propios migrantes peruanos, luego de algún tiempo de experiencia de trabajo en Japón son utilizados para conseguir trabajadores para el Japón. Las empresas o las “agencias contratistas de trabajo” les solicitan trabajadores, de esta manera ellos incluyen en la experiencia migratoria a sus familiares y amigos.
5.- Empresas japonesas.- Directamente buscaban relacionarse con el mercado laboral nikkei peruano. Llegaron hasta Lima y ofertaron el “Viaje por Trabajo al Japón”. Lo hacían sin intermediarios aunque en algunos casos relacionados con “Agencias de Viajes”. En este caso son empresas grandes.
Salvo las oficinas de las Agencias de Turismo que tenían locales apropiados para atender al público, no había locales y oficinas dispuestas o adaptadas para atender las solicitudes de trabajo, la atención se realizaba en domicilios particulares o en las trastiendas de negocios diversos.
b.- Avisos en japonés. Los Pioneros. – (1985 – 1988)
En esos primeros momentos, por los años 1986 – 1988, el perfil del migrante pionero estaba fuertemente relacionado con el nivel de ascendencia japonesa. El principal argumento que se daba para sustentar ello, es debido al problema del visado de permanencia en el Japón, ya que no existía visa de trabajo, vienen como vista familiar, quienes viajan son japoneses, ya sea por nacimiento o por haber sido registrados en el Consulado japonés en Lima. Luego aparecen como seguros postulantes aquellos que tienen una relación más cercana con el Japón por tener familiares directos y con contacto en el Japón que daba una salida al problema de la visa con un trámite para “visita de reencuentro familiar”, con la invitación y garantía de un familiar japonés.
Las edades de los primeros migrantes oscilan entre los 30 y 40 años, sus oficios son variados: comerciantes cuyos negocios se habían arruinado por la vorágine de la crisis inflacionaria peruana, empleados de casas comerciales nikkeis y japonesas, sin un futuro a la vista. Sus proyectos de viaje son planteados con un tope de dos años; no consideran más tiempo porque se percibe la crisis económica del Perú como algo transitorio y la incertidumbre del viaje al Japón no permite trazarse planes más concretos y largos.
Entre los años 1986 a 1987 surgen los primeros avisos en Lima ofertando trabajo en Japón, aparecen en los periódicos de la comunidad nikkei como el “Perú Shimpo”. Estos avisos son en idioma japonés. La intención es obvia, quienes se enteran del contenido de esos anuncios, conocen el idioma japonés, y el aviso va dirigido a ellos. Ver avisos de 1989 en Anexos.
El número de migrantes es pequeño todavía en esta primera etapa. Debido a los problemas para conseguir la visa y porque pese a que las necesidades de mano de obra de las pequeñas y medianas empresas japonesas se acrecientan, no hay todavía la salida legal que posibilite su venida, por la lentitud del aparato político – jurídico japonés. En 1986 el número de peruanos en Japón eran de 553 personas, según cifras de la Oficina de Inmigraciones dependiente del Ministerio de Justicia del Japón (Cuadro No1). Aquí existen algunos migrantes económicos. Pero no podemos hablar todavía de un fenómeno migratorio pues su presencia era mínima. La mayoría de peruanos en esta época son estudiantes o profesionales becados. En 1987 se registran 615, ya hay un incremento de peruanos nikkeis trabajando en las fábricas japonesas.
***************
Sobre el autor:
Álvaro Del Castillo, sociólogo peruano residente en Japón. Autor del libro “Los peruanos en Japón” publicado en el año 2003 1999, y quien compartirá aquí algunos capítulos del mismo. “El principal objetivo de este estudio es conocer la realidad de los peruanos migrantes en el Japón. El Perú está al otro lado del Japón en el globo terráqueo. Salvo la experiencia histórica de inmigrantes japoneses al Perú a principios de siglo, no existía ninguna relación que llevara a pensar en la migración de peruanos al Japón. Para los actuales migrantes era inimaginable, a mediados de los años ochenta, pensar en trabajar en Japón. Aparte de la distancia, las diferencias culturales, idiomáticas y el desconocimiento del país eran obstáculos insalvables. Los peruanos no escogieron migrar al Japón, el Japón los escogió. Fue una “burbuja económica” que elevó el nivel de vida y la productividad japonesa la que incentivó la migración de los peruanos. Si no hubiese acontecido la solicitud de trabajadores por parte del país de recepción (Japón), la migración de peruanos al Japón, no hubiese sido posible”.
24 enero, 2014
Quisiera saber como hago si llego al japon si hay forma de hablar con los peruanos que residen en ese pais
24 enero, 2014
Saludos Wetnes, podrías usar cualquiera de las redes sociales, dejar un mensaje, cómo ubicarte, cómo contactarte, los motivos, etc.
6 julio, 2014
Que tal, ¿sabrán si es posible conseguir este libro? Gracias
4 agosto, 2014
Saludos, escríbenos con algún dato de contacto tuyo para enviárselo al autor del mismo.
5 agosto, 2014
Muchas gracias, mi correo es averonab@gmail.com y mi nombre es Aarón Verona. Saludos.
2 diciembre, 2017
como se puede conseguir el libro y de ser posible contactarse con el autor por favor podrian responderme mi correo es incaico10@hotmail.com