Colaboración: Con Dios y con el Diablo
Ahora que ya empezó el calor, y después de caminar bajo el sol, quise calmar la sed. Dentro de una de las estaciones de Tokio, vi a lo lejos dos máquinas expendedoras de bebidas.
Una de ellas era de Ito-en conocida por sus jugos naturales y otras bebidas no-gaseosas. La otra era de la marca “Dole” con imágenes de plátanos. “¿Jugo de plátano? Habrá que probarlo” pensé. “Un jugo de plátano no me vendría mal”.
Sorpresa la mía cuando no eran jugos enlatados lo que vi. Y sorpresa mayor, cuando vi el precio de un plátano.
Al tipo de cambio de hoy, un “Boby Banana” (nombre del producto) cuesta un dólar con treinta centavos. No sólo hay plátanos, si no también snacks de plátanos, conocidos como “chifles” en varios países de Sudamérica.
Al final, decidí comprar solamente agua mineral. Los plátanos los compro cerca de casa, y pago la cuarta parte de un “Boby Banana”.
17 mayo, 2014
おもしろい